La medicina homeopática no sólo se encarga de sanar a los seres humanos. Esta ciencia, que data de tiempos inmemorables, también se ha dedicado al estudio de diversas especies, siendo su objetivo salvar sus vidas. Poco a poco algunos médicos veterinarios han decidido incorporar esta técnica para investigar a los animales que habitan en los zoológicos, curar sus enfermedades, mejorar tanto la productividad como las condiciones de parto del ganado vacuno, los caballos, además de atender las dolencias crónicas que padecen las mascotas, especialmente los perros y gatos.
Este es el caso del doctor Felipe Larrazábal, quien asegura que su mayor logro es devolverle la salud a un animalito durante el transcurso del día a día. No se debe confundir la curación con el alivio de los síntomas. Esta diferencia la establece la homeopatía cuando ataca la enfermedad de raíz para que jamás vuelva a aparecer, a través del principio: Lo similar cura lo similar.
Bajo este concepto fue creada la vacuna que inocula o aplica una muestra o el virus causante del mal para que el organismo pueda producir los anticuerpos y logre defenderse. En este sentido, señaló que utilizan una gota de sangre del animal enfermo para que pueda sanar definitivamente su dolencia.
Atiendo problemas cardíacos, musculares, cerebrales, artritis, afecciones en los huesos y la piel. La acupuntura la aplica una vez a la semana a sus pacientes después de un estudio completo. Entre la medicina homeopática y la que recetan los médicos (conocida como alopática) hay una diferencia: la primera tarda en curar y la otra demora menos en mejorar.
Agregó que su servicio sirve de referencia médica y complementa la labor del veterinario de confianza, para tratar aquellas enfermedades crónicas que padecen las mascotas. Lo importante es unir criterios para ofrecer una atención integral a favor del paciente.
Alternativa milenaria siempre vigente
Guaireño de corazón, el doctor Felipe Larrazábal, se graduó hace 31 años como médico veterinario en la Universidad de Sevilla, España. A lo largo de su trayectoria profesional ha practicado la acupuntura durante 21 años y tiene doce años de experiencia en la ciencia homeopática. Actualmente trabaja en el consultorio Especialidades Veterinarias en El Paraíso. Comentó que la acupuntura surgió en China hace miles de años, mientras que en occidente se empezó a utilizar en forma empírica durante la Edad Media, con la finalidad de tratar a los animales con punciones en diferentes partes del cuerpo, a través de lancetas, hierros y espinas. Cuando se presentan enfermedades iatrogénicas, producidas por los efectos secundarios de los medicamentos, así como las dolencias crónicas, es necesario acudir a la homeopatía como medicina alternativa.
CONSEJO DEL EXPERTO
Felipe Larrazábal, médico veterinario Mucha paciencia, serenidad y confianza deben tener los dueños del animal que va a ser sometido a un tratamiento homeopático, porque la curación será larga y tediosa, pero le devolverá su salud. El paso inicial es desintoxicar previamente a la mascota. Ese período suele durar entre los 10 a 15 días, entre tanto los síntomas de su mal empeorarán. Sus propietarios suelen alarmarse, pero sólo se trata de una respuesta normal de su organismo al manifestar la sintomatología de sus dolencias anteriores y recientes. Una vez superada esta etapa se le aplicará los preparados homeopáticos, según amerite el caso. Este proceso suele durar mes y medio. Los precios de estas medicinas son solidarios. Esta es una de las ventajas de esta ciencia alternativa. Además, la homeopatía no deja ningún vestigio de la enfermedad, sino que utiliza sus síntomas, porque la energía que éstas despliegan al ser reactivada en el organismo le pone un definitivo punto final al mal, evitando su posterior reaparición. Se usan productos orgánicos y minerales. En la naturaleza encontramos la fuente de la sanación. Cuando realizo mis preparados, machaco muy bien los ingredientes para que no pierda por oxidación sus valores nutritivos y curativos en las aspas de la licuadora.
CONSEJO DEL DÍA
Para recalcificar los huesos del cachorro debe machacar muy bien la concha de un huevo y dársela en su comida.