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Hamster: Una mascota pequeña y tierna

Aunque muchas personas suelen confundirlos con simples ratones, los hamsters son unos animalitos bien especiales que pueden brindarle muchas satisfacciones a quienes deciden tenerlos en casa como mascotas. Sin embargo, como todos los animales que viven bajo el cuidado del hombre, requieren a cambio mucha atención para poder mantenerse sanos y sentirse a gusto en su nuevo hogar. De allí, la importancia que tiene que su dueño conozca todos los secretos de estos mamíferos roedores, originarios de Asia Menor, cuyo nombre deriva del alemán “hamsters”, que quiere decir acaparar, por su capacidad de almacenar alimentos en una especie de bolsita que poseen en las mejillas.

Debido a que existen muchas especies de hamsters y a los hábitos de estos animales, una de las principales cosas que hay que saber es cuál es el lugar más apropiado para que ellos vivan, qué deben comer para que no enfermen, y cuáles cosas les gustan.

En su hábitat natural, los hamsters viven dentro de madrigueras con túneles o compartimientos, los cuales utilizan muchas veces para dormir o guardar sus alimentos. En casa, el ambiente debe ser similar para que puedan sentirse cómodos, debido a que son muy frágiles y el frío y la humedad los afecta, pudiéndoles causar enfermedades graves. En el mercado, existen diversos modelos de casas para estos animalitos, dependiendo de su tamaño y variedad. Las más comunes son las jaulas que tienen dentro una rueda para que hagan ejercicio, bebedero y comederas, con fondo de aserrín para sus necesidades. También son adecuados los recipientes de cristal, con suficiente ventilación, sobretodo para los hamsters enanos grises que apenas trepan.

En cuanto a su alimentación, es bueno saber que se alimentan no sólo de granos y verduras, sino también de comida de origen animal, compuesta de insectos y larvas. La dieta más ventajosa para este tipo de animales es la rica en fibras y pobre en grasas. Debe incluir los cereales, las semillas para cubrir sus necesidades de hidratos de carbono, las frutas y las verduras para satisfacer sus necesidades de líquido y vitaminas. La carencia de proteínas de origen animal puede producirles enfermedades y cambios de conducta que pueden derivar hasta en el canibalismo. Cuídelos.

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